Antonio Martínez González

Nos cuenta cómo vivieron en el pueblo la Guerra Civil, todas las disputas que tuvieron y la posterior represión. Nos habla de su juventud y los noviazgos. Él ha trabajado en las huertas de las que nos cuenta cómo se regaban, el daño que provocaron las riadas, y cómo han ido siempre al río a nadar y a pescar.

Fecha de entrevista: 02/07/2021

Comarca: La Manchuela
Municipio: La Recueja
Provincia: Albacete
Pais: España
Año Nacimiento: 1935
Género: HOMBRE
Entrevistador: Antonio Lucas (Producciones Bressol)

 

– LA RECUEJA

Antonio Martínez González, pero el apodo…, que me conocen por el apodo, el Nogueras.

Entrevistador ¿Por qué?

Porque mi padre y mi abuelo, estuvo en un molino y que entonces eran molinos del río, y estuvo ahí en la parte de Cuenca de molinero. Y había una noguera muy grande y se le quedó el nombre ya a mi padre, de su padre, y sigue ahora conmigo, mi hijo y mis nietos y todos.

 – HISTORIA – GUERRA - GUERRA CIVIL - RELIGIÓN

Nací en el 1935 y ya cuando terminó la guerra, ya tenía 5 años, que aún me acuerdo.

Entrevistador: ¿De qué se acuerda?

Me acuerdo de que venían aquí en la guerra matar, no mataron a nadie. Como ustedes son jóvenes saben más que uno y la historia y de todo. No mataron a uno porque aquí hubo suerte, porque el Estanislao era socialista y entre los socialistas y los comunistas se pusieron enfrentados, y aquel el socialista era alcalde del pueblo, y ¡claro! cuando los milicianos que decíamos, les decíamos milicianos a los que venían al pueblo, si hay algún, había alguno tecloso de derechas y todo eso, pá arriba, pá arriba quiero decir a Albacete a juzgarlo. Y bueno que ese hombre se puso en confrontado con los socialistas en aquella época, y porque los socialistas aquí para mí es un…, bien a ver si me entiende, no tengo que hablar ná, pero de los comunistas aquí tengo que hablar mucho.

Pues mire usted, mi padre se libró porque de aquí se llevaron a 14, vinieron los milicianos y se llevaron a 14. Mi padre, un tío mío, bueno, éramos de derechas nosotros, ¡claro! y cogieron y se los llevaron, que muchas veces, en muchos sitios, del Pozo Lorente se llevaron, se llevaron a 3 y a 3 que limpiaron, pero tuvimos suerte. Mi padre y los que fueron 15, Roberto el molinero, bueno, tú lo sabes quién son todos, y cuando llegaron allí había uno de Cubas que era analfabeto, era analfabeto el pobre, un hombre, y como nos conocemos Cubas y esto, y cuando los vio allí en el que era del tribunal…, bueno de los que juzgan, que si aquel hubiera dicho: “¡Eh!, al paredón”, hubieran ido al paredón, pero este que le decían Estanislao, que era alcalde, que era socialista el hombre, los libró, los libró. Y antes, cuando venían, que venían un día y otro, y otro, bueno los milicianos venían a los mismos de derechas, date tu cuenta qué disparate,  ahí en eso le decimos el Estrechillo, ahí en ese peñasco, el Estrechillo y el río que está ahí y les daban escopetas para que no pasaran los milicianos, siendo un hombre socialista, que aquel hombre lo hizo bien en el pueblo, aquí no se mató a nadie, lo único que buscaban era al curilla, el curiila estuvo escondido. ¡Hombre! si lo hubieran cogido lo habían matado, a un señor que era hijo de un cura, que le voy a contar cómo fue: había un cura aquí, yo el cura no lo conocí, ¿eh?, este hombre sí, al hijo lo conocí. Y una vez vino el obispo, ¡claro!, a la casa del cura y tenía una criada que era la madre del hijo, la madre del hijo del cura era esa señora, una que le decían la tía Juana le decían, que yo llegué a conocerla. Y le dijo, dice: “oye Juana, ellos estaban en un sitio y dice: “el crío lo tienes ahí, que no se escape, que no se escape” y bueno, todo eso y se escapó, y estaban reunidos allí, pues entonces lo que pasaba en los pueblos, el alcalde, los concejales…, esto fue antes de la guerra, esto, y los concejales y todo eso. Y llega el crío, llega el crío y dice: “papa”, ¡madre mía!, y estaba el obispo, y se quedó don Juan, me parece que le decían al cura y se quedó: “sí, sí, sí señor. Si me tiene usted que excomulgar, me excomulgan, pero es hijo mío”, y allí dice que se quedó la cosa.

Aquí había uno que vive aquí detrás que le decían Baltasar del Haro y otro Baltasar vivía allá arriba, en el mío, aquí en el pueblo, claro 2 Baltasares, y vinieron los milicianos, y ese señor estaba escondido en ca Baltasar, con un Baltasar que estaba escondido aquí y Estanislao fue el que lo avisó cuando…, y llegaron y vinieron aquí, no miento, y fueron allí donde no estaban ¡claro!, y luego al otro Baltasar no había otro y venía aquí y estaba escondido el curilla ahí, y luego ¡claro!, mandaron rápidamente a uno a decir al Baltasar este que iban los milicianos buscando al curilla, y al curilla entonces lo sacaron por el tejado porque estaban en la calle esperándolo. Aquel sí lo habrían matado sí, ¿eh?, Salvador, porque es que era un señor que tenía tierras, tenía una labor y ¡claro!, y entonces al que tenía era al que apretaban, y este hombre no era mala persona ni nada, nada más que mira, pasó eso, y se libró por eso. Y desde aquí se fue a Valencia a esconderse, y vivía allí en un piso, a esconderse, pero los milicianos se enteraron de que estaba en el piso, y subían por la escalera, ¡claro!, a por él, dicen: “¿vive aquí un tal José María Gualda?”, y era él, que los milicianos no lo conocían, dice: “¿aquí vive un tal José María Gualda?”, es que él estaba bajando las escaleras entonces, dice: “no, señor, aquí no, no sé sabe nada de eso”, y era él y entonces se vino aquí al pueblo y estuvo, ¿sabes dónde?, donde el Saquero, ¿te acuerdas del Saquero?, ¿sabes quién te digo?, estuvo allí escondido.
Y entonces esos eran del pueblo, los del pueblo, los más destacados comunistas, e iban en un grupo, e iban registrando las casas. En mi casa teníamos un bidón así de aceite, iban con una vara que lo medían y te decían el aceite que tenías que gastar, siendo de uno y más luego, a una hermana mía, que le decían Isabel, entonces se hacían ajuares cuando se iban a casar se hacían ajuares ella y las mujeres y los hombres también hacían, y le dijeron que…, estaba en una arca así que aún la tengo, que a ver lo que tenía en el ajuar y mi hermana Isabel era muy nerviosa, bueno se puso…, y les dijo, y tuvo que irse y ¿sabe usted aquella noche ande durmió detenida?, en la Iglesia durmió, a otro día ya…, porque allí entonces, aquí en las fiestas de San Mateo había aquí…, el patrón del pueblo, era San Mateo y se hacía una fiesta grande, y se hacía un baile ahí en la plaza, bueno…, bien, bien,  esta de aquí al lado del puente. Sí, ahí, ahí, ¿ahí en la cuesta esa? estaba siempre el baile cuando en San Mateo, pero cuando en la guerra, en los tres años de guerra, los bailes los hacían en la Iglesia, la Iglesia, dese usted cuenta que ya habían quemado todos los santos, que no fueron los de afuera, fueron los de aquí, los quemaron allí enfrente del cementerio aquel, quemaron los santos, ahí está el cementerio y quemaron todos los santos y eso lo hicieron un salón de baile, la Iglesia. Luego, al terminar la guerra, un tío mío que era, me hace que era cuñado de mi padre y mi padre era de una parte y el otro de otra, y luego fueron a la cárcel lo menos 7 u 8, los más que se destacaron, a él se lo llevaron a la cárcel, allá a Santander ná menos, lo que hace es que estuvieron poco tiempo, estuvieron dos años ¡hombre! poco tiempo, si hubiera sido yo, pero bueno, dos años estuvieron y era un tío mío, que este que se ve que tenía bastante, que decían, este tenía bien, una casa muy arreglada pero aún quería más, y el ganado que tenía este señor del curilla, se lo bajó a su casa. Vivíamos ahí juntos. Mi tía…, la mujer de él, era hermana de mi padre y vivíamos donde vive…, nosotros vivimos aquí y a la otra casa era donde vive ahora Salvador, que era de mi tía, y la noche que vinieron…,  aquí se liberaron mucho. Tu tío Ortega libró a 2 o 3, los que habían sido de derechas, pos libraron a muchos iban, venían aquí, 10 o 12 de los más que se iban a llevar y eso, y cuando aquella noche que vinieron a por ellos, a por lo más destacados de los que habían hecho todas esas cosas, me acuerdo que había allí un corral donde tienes tú el porche, había un corral y las medianeras, son la medianera es una, una tapia que no estaba cubierta el corral, la medianera, y  mi tía Demetria a mi madre: “¡Isabel, Isabel!”, y ya sale mi madre de la cocina: “¿qué quieres Demetria?”, “dile a mi Paco que se llevan a Pedro José”, y mi padre estaba acostado ya, estaba acostado y dice: “le dices que cuando se lo llevan…, no pensó cuando me llevaron allí, que si no hay allí un hombre que nos libra, estábamos en el otro mundo”, y mi padre no se levantó, y no se libró, si se hubiera levantado, en aquella época, porque a ellos no los juzgaron ni nada, más que al terminar la guerra, lo que fue: “venga, de lo que dice este señor se hace…”, bueno y ¡claro!, y no, y mi padre no salió, y se lo llevaron, porque es que si no hubiera sido por aquel que había allí en Albacete, que en el juzgado nos libró, le habría costado la vida a mi padre. Oye, nosotros luego hemos sido una familia…, nosotros éramos 7 en mi casa y ellos eran 5, me parece 5, oye, y teníamos ahí una en La Casilla, una laborcilla, nada, cuatro cosas y hemos estado juntos toda la vida, y nos hemos llevado…, mis primos hermanos y yo nos hemos llevado bien del todo. Volvió que se lo llevaron presos, y estuvieron en Santander dos años cada uno de ellos, y ya luego vinieron, y me acuerdo que decíam…, yo no me pilló, cuando murió mi tío Pedro José, José María, aquel del otro lado, cuando se despidió del pobre que estaba muerto y: “¡ay que lástima!, que no nos vamos a poder vengar de ellos”, digo: “¿qué te parece aún?”

HISTORIA - TRANSICIÓN

Cuando la democracia, cuando esto se hizo que el más viejo de los que eso iba a ser Presidente de Castilla la Mancha y este hombre ya que te digo, Estanislao, que hizo bien en el pueblo, él fue poco, es que era, era de los de antes, que no tenía estudios ninguno, ni nada, y allí se equivocaba en muchas cosas y lo quitaron.

– HISTORIA - POSTGUERRA

Lo único es que estaba castigado, mira si le gustaba la caza, le gustaba muchísimo la caza y no pudo tener escopeta ninguna, él que le gustaba la caza de escopeta y todo eso y él en la vida de nosotros, él lo ha conocido como yo, se tenía que valer de ir a cazar con miedo, sin escopetas, porque lo castigaron con esa pena nada más, con la pena esa, si no, hubiera tenido que ir a la cárcel. Los que venían aquí al terminar, dos días después de terminar la guerra, fueron falangistas, y por lo que hizo en el pueblo este señor Estanislao, pues era menos y lo dejaron en que armas no podía tener, pero los otros se los tuvieron que llevar, y vinieron todos me acuerdo yo que, bueno, éramos vecinos mi tía y yo, nosotros, y le hacían cantar el “Cara al sol” todas las mañanas, ¡fíjate!, a un comunista y vino y muchas veces aquí lo que pasa, qué malo es la guerra civil, es que es mala ¿eh?. Nos confrontaron a unos con otros y mala. Y le decía, un pastor, tenía un pastor y decía: qué, ¿qué se sabe usted bien el “Cara al sol? El Chusco, el Chusco era una persona, pos un trabajador infeliz, pero y ¿qué?, allí canta usted bien el “Cara al sol”, cabrón, los cabrones. Pero eso ya cuando estaba ya fuera de la cárcel, no.
Aquí en el pueblo no se notó, no se notó. Nosotros, yo tenía amigos y este también, hemos tenido amigos comunistas, ahora en las transición esta que se hizo, hemos tenido comunistas y hemos sido amigos, no hubo ninguna rencilla, pero es que al mismo terminar la guerra, también que éramos críos, yo tenía ya iba a hacer 6 años ya, y ya me acuerdo, ya de guacho ya nos juntábamos toda la vida, aquí no ha habido rencillas de esas ninguna.

HISTORIA - POSTGUERRA

Aquí hubo no mucho, aquí hubo unas cuantas familias que, uno es Chapa, uno que le decían Chapa, otro en ¿cómo decían? que no me viene a la cabeza ahora, bueno, 5 o 6 familias que lo pasaron mal. Pero los demás, que si la huerta, todo esto ahora están perdidas todas, ahora no hay huertas ninguna, perdidas, pero la huerta era una buena…, para poder vivir porque se sembraba de todo, de todo, hortalizas, bueno, se vivía de eso.

 – AGRICULTURA – CULTIVOS - CÁÑAMO, ESPARTO Y AZAFRÁN

El cáñamo se hace muy alto y se arrancaba, se regaba y recién echada el agua lo cogían porque lo arrancaban así, lo arrancaban y eso costaba mucho, pero cuando estaba la tierra blanda ¡claro!, salía mejor, cañamones es la simiente. Para hacer como tela, se vendía como para hacer…, antes, ahora son de a lo mejor son de aluminio y entonces eran de cáñamo y las alpargatas de esparto. ¿Ve usted aquello que hay allí?, aquello es esparto, y se hacían de aquí alborgas que decían, alborgas sí, alborgas que era una cosa de soguilla hacían con esparto verde recién cogío, y se hacía una soguilla y luego lo hacían, bueno, se cocían también. ¿Sabe usted lo que más se sacaba el dinero aquí y vivía la gente regular? el azafrán.

Entrevistador: ¿Cómo es eso?

La rosa del azafrán, que poníamos mucho, ¡hombres, mucho!, todo el mundo tenía y eso hacía un mundo, porque entonces valía, en aquella época valía dinero, y eso nos hacía mucho.  Eso está en flor y lleva 3, no sé si lo habrá visto usted, 3 mazos, y para sacar 1 kg de eso, no sé si eran 3 arrobas, sí, en rosa, 3.000 rosas, para tener 1 kg de azafrán ¡cuánto!... entonces la gente se ayudaba, el que tenía menos le ayudaba al otro en sacar ahí unas mesas largas, las mujeres, los guachos, todos los que de esos a sacar rosa, a sacar rosa, y aquello hizo mucho. Llegó a pagarse a 40.000 pesetas la libra, a 40.000 pesetas la libra, bueno, dos libras, son casi 1 kg, me parece que varía un poco.

¿Ustedes saben lo que es un ciazo?, no, no. Cuando se molía el trigo, salía con el salvao, la harina salía revuelta con el salvao, y para hacer el pan había una cosa, que eran los ciazos que decíamos y eso luego, había que tenerle mucho cuidado, ¿eh? echabas unas ascuas abajo y el ciazo se ponía y le ponían el azafrán que de cuando en cuando tenían que ir moviéndolo, si lo pasabas, si lo pasabas perdías categoría en el azafrán. Y para poner las cebollas eso eran…, las simientes eran unas cebollas así que decimos, una cosa así redonda, que había que sacarla, luego, luego en la casa la tenías que pelar, y luego a mano hacer una zanja, e ir poniéndola con la mano, que llevaba un trabajo enorme. Y luego también venía bien porque estaba una cosa, cuando ya nacía, que le decían espartín, así se ponía y para las mulas que teníamos, los segábamos y también bueno, bueno.

– AGRICULTURA – REGADÍO – HUERTA - TRABAJO EN LA HUERTA

Y yo he estado de toda la vida… nosotros, huertas hemos tenido, pero no, no hemos tenido hortalizas. En mi casa, en mi casa no, no sembrábamos en la huerta nada. Sembrábamos sí, panizo verde, maíz y segábamos y comían las caballerías pero, hortalizas nunca, nosotros siempre lo echábamos en secano, la hortaliza, los melones, los tomates, los pimientos, las bajocas..., todo en seco. Teníamos una tierra muy buena, que eran frescas. Y lo del campo tenía más categoría que el regadío, y aquí también tenemos una suerte: el agua que gastamos en la huerta es gratis. Aquí no se paga nada.

– ENERGÍA – CENTRAL ENERGÉTICA – RÍO - CENTRALES HIDROELÉCTRICAS

Eso era la casa compuerta. Hay ahí una compuerta que cuando limpiaban el canal las subían y limpiaban el canal. La central era de los franceses, de unos franceses, una central eléctrica, sí eléctrica y está a 2 km y medio o 3 de aquí y ahí arriba hay otra central de Jorquera, que por ella han pasado que vienen por la otra. Y ¡claro!, aquí el río va sucio aquí porque el agua se la lleva al canal, porque lo escurrizo…, ahí había unos escurrizos ¿sabe usted?, y ahí no había eso que hay arriba, la gorrinería esa, no estaba limpio del todo. Y entonces el canal chupaba menos, chupaba menos agua y el agua caía por el escurrizo y daba gusto en verla. Eso lo construyó, mi abuelo trabajó allí, mi abuelo Francisco trabajó ahí en el canal, esto fue por allá por el año 27, por allá.

 – PARAJES NATURALES – RÍO – BEBER AGUA DEL RÍO

Antes casi bebíamos del río, casi todo el mundo. Hay ahí dos barrios, uno del otro lado que decimos y el barrio y ahí bebían agua del río, aquí no venía…, aquí había una fuente y no venían, y nosotros cuando íbamos a la huerta, ni botellas, ni nada ni nada. Y estaba buenísima. Pero ahora, ahora si bebe usted puede que se una al otro mundo.

 – PARAJES NATURALES – CATÁSTROFES NATURALES – RÍO -  RIADA DE 1982

En el 82 llegó el agua al tejado ese. Nosotros tuvimos que…, este y nosotros sacar todo, no pudimos sacar todos, mira. Y llegó, sí, llegó a la media está, pero al de arriba sabe usted, una pared, y nosotros como vivimos ahí en la casa, así de agua y acaba la carretera esa que habrán venido por ahí, cuando venían de Jorquera, a la carretera llegó el agua. Aquí estaba yo ahí, en mi puerta, aquí se sacó una víctima, bueno, se fueron 2 o 3, una aquí, ahí, en la acequia esa.
Eran de aquí 30 o 40 km vinieron aquí, y ahí una, ahí uno y ahí más arriba, aquí a 200 o 300 metros había una en una noguera que había, travesado. La del 82, que no era el agua del río. Murieron, murieron tres.

 – PARAJES NATURALES – CATÁSTROFES NATURALES – RÍO – RIADA DE 1941

Eso me acuerdo yo, de que yo tenía 6 años. Y en el 41 fue grandísima también y aquello sí que la ruina dejó. Dejó las huertas perdida del todo, se llevó las plantas que había, bueno, todo se lo llevó la riada y en aquellos años que eran, el 41, que había poca…, que había poco que..., ya lo digo. Y los otros perdido porque la otra no, la otra nos dieron dinero. En esta del 82 la administración a mí me dio 200.000 pesetas. Y un hermano mío que también le pilló la riá, que vive ahí, bueno ha muerto ya, ahí bajo, tenía dos gorrinos y aquí eran, abajo las cacheras de cómo se mataba en las matanzas, siempre tenía uno un gorrino, el otro dos, y estaba en la cachera los dos gorrinos y arriba estaba el gallinero que es ande duermen las gallinas. Yo no sé cómo fue, cómo se podían meter ahí los animales, subió casi al gallinero, el agua subió al gallinero, pero en el gallinero no subió tanto, se soltaron los gorrinos y se refugiaron en el gallinero.

– PARAJES NATURALES – RÍO - EL RÍO JÚCAR: ANTES Y AHORA

El río antes estaba limpio y ahora el río cría muchas cañas y mucha gorrinería. Entre las huertas y el río crían mucho, ahora no se le puede tocar a eso. Antes estaba limpio todo. Porque se necesitaba para leña, para lumbre y había árboles y los cortábamos y las cañas, esas que dices, estas que se hacen muy altas estas también, se cortaba todo y el río estaba limpio. Ahora ya hay muchas plantas que van de un lado del río al otro, así. Y antes cada uno, tú tenías un poco soto, le decíamos soto, limpiabas lo tuyo y estaban limpios del todo. Y ahora no, ahora no te puedes acercar por ningún lado.

Entrevistador: ¿Porque no te dejan?

No, no te dejan, pero ya te denuncian los animalistas, esto como les digan, los medioambiente. Y entonces el río subía, pues tanto o más que de aquí ahí enfrente era río todo.

29:53 TIRAR ANIMALES AL RÍO

Siendo yo pequeño, las mulas y yeguas que se morían se echaban ahí, en el puente ese. Se echaban al río. Eso lo vi yo. A lo mejor cuando llegaba a Cullera, a lo mejor ya había desaparecido todo, pero las mulas, los arres que había entonces, que entonces no había maquinaria, y aquí había bastante. Bueno si se moría alguna, ahí al puente abajo, pero que no se quedaba ahí, como bajaba agua, se los metíamos a los de Alcalá.

PESCAR CANGREJO

Era el autóctono. Era un cangrejo así pardo, un poco negruzcos, bueno pardejo, luego vino el americano, con una cabeza así, una cola así, mató a los otros. Y esto, esto así la cola, así, y el..., los de ahora que teníamos de los nuestros, como digo yo, la cola era así la cabecera así. Pero darse usted cuenta lo que es la vida. El cangrejo, cuando yo era mocete de 14, 15, no cogíamos ni uno, no comía nadie cangrejos. Pero hace 30 años o por ahí, cuando vinieron de Madrid y los vendían allí, todo el mundo quería cangrejos. Y en aquellos tiempos ¿qué había ganas de cangrejo?, no porque cuando los cogíamos, no los comíamos nadie. Cangrejos, ¡madre mía! y ahora sí, y ahora es una cosa. Cuando quitaban el agua esta de aquí para limpiar las acequias, para limpiarla, en invierno se limpiaba las acequias de barro, bueno... así.

– PARAJES NATURALES – RÍO – OCIO Y TIEMPO LIBRE - BAÑARSE EN EL RÍO

Le voy a contar esto de las mujeres. Nosotros de 14 y 15 años ahí nos bañábamos desnudos. Es que ahí había un arenal, había un arenal ahí grande y nos bañamos desnudos y las mujeres, nosotros desnudos y las mujeres se ponían capisayos hasta aquí, capisayos quiero decir taparse del todo, y los guachos, los zánganos íbamos, sabíamos que era, ahí se bañaba en un sitio que le decían el Tablón y allí bajo, y tenían que ir las madres con ellas y echarnos por allí las madres quitándonos a todos para que no los viéramos y ellas bañándose. Y como les subía, como nos estamos, porque era como una se les subía para arriba, el agua le subía la falda para arriba y se le veía todo, y nosotros ¡madre mía! Sí las mujeres entonces en mi época ahí lavaban, lavaban la ropa, ahí lavaban la ropa, ahí, sí, en el río y allí había allí unas junqueras grande y todo eso, pues las mujeres, para que no les viéramos las pantorrillas se ponían detrás una cosa, porque si no…, allí a ver si les veíamos algo, las pantorrillas. ¡Madre mía! las pantorrillas verlas,  ¡adiós! y ahora yo creo… Yo me parece que hemos pasado una juventud nosotros mejor que los que la pasan ahora,  porque al tener todo…, nosotros ver las pantorrillas, me cago en la puta reina, hacía reacción, pero ahora que están viendo todo, yo tengo dos nietas y digo: “pero bueno como esto”... y…

– OCIO Y TIEMPO LIBRE – BAILE - EL NOVIAZGO

Nosotros aquí en el baile salíamos y se asentaban así las madres, allí en unos tablones que había y los demás ya así. Y allí dentro había uno que era, éramos los que no bailábamos nada, los que no bailábamos nada, y allí nos recogíamos los que no bailábamos. Aquí venía un hombre que le dicen…, bueno, te lo voy a decir, que este lo conoce también, uno o dos eran, que venían de una heredad que no habían visto mujeres ninguna. Y entonces llevábamos en aquella época nuestras chaquetillas y todo en fiestas, no eran muy lujosas, pero bueno, eran. Y aquellas cuando bailaban con ellos te rompían, te rompían las chaquetas, ellas y las cogía uno, estos que no habían visto una mujer y las cogían y las chaquetas, aquello parecía, bailar parecía la lucha libre. La madre cuando ya pasaba a la casa este, y todo eso, y yo…, la madre estaba…, se dormía y el novio y la novia estaban allí, cuando se dormía podías hacer algo si no... me cago en la puta madre, pero ¡madre mía!

 – SOCIEDAD – VECINDAD - RELACIÓN CON LOS VECINOS

Distinto, es muy distinto todo, las costumbres de la casa, todo. Aquí vecinos, los vecinos cuando llegaban los inviernos todas las noches nos juntábamos en una casa y había una armonía allí alrededor de la lumbre, allí éramos 12 o 14 o 15, los que fueran, y era otra armonía, entonces no había…, hoy maldad no hay, pero aquello era otra cosa, te podías fiar mucho más que te puedes fiar ahora.

 

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